Sincretismo religioso: de congo y carabalí.

Un elemento que constituye un rasgo de identidad cultural y idiosincrasia en Songo- La Maya es el sincretismo religioso, que ocurre cuando los credos o cultos de dos o más religiones o tradiciones religiosas se entremezclan.

Este fenómeno comienza a tener lugar con la llegada de los conquistadores españoles a Cuba. En aquel entonces, los aborígenes tenían algunos rituales sencillos para atraer la lluvia y mejorar las cosechas.

Debido a que no había un idioma desarrollado entre los grupos aborígenes que poblaban la isla, según restos encontrados en las zonas montañosas como pequeños ídolos de piedra o madera, se afirma que adoraban algunos elementos de la naturaleza como el agua o el fuego.

Después con la llegada de la colonización española, se introdujo la religión católica en la isla, decretándola como la religión oficial, la cual ha conservado esta posición hasta nuestros días.

También en Cuba existen las Iglesias Protestantes, que son el resultado de los grupos que se separan de la iglesia católica.

Estas Iglesias comprenden a los bautistas, pentecostales, testigos de Jehová, Adventistas del Séptimo Día, presbiterianos, anglicanos, episcopales, metodistas, Sociedad Religiosa de los Amigos (Cuáqueros), y a los luteranos.

Otros grupos incluyen a la Iglesia Ortodoxa Griega, la Iglesia Ortodoxa Rusa, los musulmanes, Judíos, budistas, y a La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.

Por otra parte, en los años de la colonia se produce la masiva entrada de esclavos a Cuba, como mano de obra, a quienes se les arrebatan sus costumbres, cultura e ideologías y se ven prácticamente obligadas a rescatar de alguna forma sus tradiciones.

A los esclavos les era prohibido practicar su religión y se les obligaba a reverenciar a los santos católicos, por lo que estos comienzan a nombrar a dichos santos como a sus propios ídolos. Por ejemplo Santa Bárbara es también conocida como Changó, la Virgen de la Caridad es llamada Oshún, San Lázaro se conoce como Babalú Ayé, entre otros.

Además, en nuestro país se practica la Santería o Regla de Ocha, derivada de la cultura Yoruba, que tiene como centro de culto a un conjunto de orishas (deidades) con diferentes mitos y atributos,      entre los que se encuentran Olofin, Olorun y Oloddumare.

La forma más sistematizada y compleja que tiene esta expresión está en el culto a Ifá, deidad cuyo atributo principal es la adivinación, sostenido por las máximas autoridades sacerdotales, los Babalawos.

Igualmente, existe la Regla Conga o Palo Mayombe, que se deriva de las expresiones de los pueblos subordinados al reino del Congo. Esta no es más que el conjunto de formas religiosas que se centran en el culto a las fuerzas naturales.

Otra expresión de origen africano, localizada en la zona occidental del país, es la agrupación secreta masculina Abakuá, también conocida como Ñañiguismo.

Por otro lado, uno de los ejemplos del sincretismo que podemos apreciar aquí en Songo- La Maya es el espiritismo cruzado, que puede definirse como la mezcla no armónica del espiritismo con cualquiera de las religiones de base africana existentes en Cuba, como la Regla de Ocha o santería cubana, la Regla Conga y el vodú.

El espiritismo cruzado es uno de los sistemas religiosos cubanos más extendidos y enraizados actualmente en nuestra sociedad

Los espiritistas trabajan con diversos objetos, como los anaqueles o repisas donde colocan imágenes de los santos, velas, copas y vasos de agua, “calderos” y cazuelas.

Y algo que casi nunca falta en el espiritismo es el altar, que se resalta durante los días de celebraciones festivas, alrededor del cual se realizan ritos y ceremonias, como sacrificios, despojos, consultas…

 En conclusión, la religión cubana se caracteriza por ser heterogénea, ya que es el resultado de la fusión bien complementada de la cultura española y africana. Como diría el sabio Don Fernando Ortiz, “Cuba es un gran ajiaco”.