¿Cómo y por qué celebramos los cumpleaños?
¿Sabes
cuál es la tradición más compartida alrededor del mundo? No se trata de los
carnavales, ni de la Navidad o de las celebraciones de Año Nuevo, sino de las
fiestas de cumpleaños, que se remontan a muchos siglos atrás.
Este
es un festejo que los songomayenses no pasamos por alto, y puede realizarse de
muchas maneras diferentes.
El
cumpleaños es el aniversario de nacimiento de un ser vivo, ocasión que como ya
te comentábamos en los inicios, se celebra en muchas culturas.
La
mayoría de las costumbres que observamos hoy día al celebrar los cumpleaños se
remontan a mucho tiempo atrás en la historia, y nacieron dentro del dominio de
la magia y la religión.
En
la antigüedad, las tradiciones de felicitar, dar regalos y hacer una fiesta,
con las velas encendidas que la completan, tenían el propósito de proteger de
los demonios al que celebraba su cumpleaños, y de garantizar su seguridad
durante el año entrante.
Alrededor
del año tres mil antes de nuestra era, en el antiguo Egipto, los faraones
ordenaban que los negocios cerraran en sus cumpleaños y daban grandes fiestas
para miles de sirvientes.
En
la antigua Grecia, los hombres ricos se juntaban en clubes de cumpleaños sólo
para hombres. A partir de la influencia de los persas, grandes reposteros, los
griegos incorporaron un pastel especial.
Los
griegos creían que toda persona tenía un espíritu protector, que estaba
presente el día de su nacimiento y que cuidaba de ella durante su vida.
Este
espíritu tenía una relación mística con el dios en cuyo día de cumpleaños la
persona nacía, una idea que también aceptaban los romanos. Este pensamiento fue
transmitido al campo de las creencias humanas y se refleja en la idea del ángel
custodio, el hada madrina y el santo patrón.
La
costumbre de las tortas, dulces o pasteles con las velas encendidas comenzó con
los griegos. Estos ponían sobre los altares del templo de Artemisa, la diosa de
la luna, tortas redondas, hechas con miel, que tenían cirios encendidos.
La
creencia folklórica es que las velas de cumpleaños están dotadas de magia
especial para conceder deseos. De modo que las velas de cumpleaños rinden honra
y tributo a quien celebra su cumpleaños y le traen buena suerte.
En
cuanto a los saludos y las felicitaciones, se pensaba tenían poder para bien o
para mal porque en este día uno estaba más cerca del mundo de los espíritus.
También
se piensa que el origen de las celebraciones de los cumpleaños está relacionado
con la astrología. Los antiguos astrólogos inventaron un calendario y
calcularon las fechas de nacimientos de reyes, gobernantes y sus sucesores.
Examinando
meticulosamente los horóscopos, presagiaban las fechas de nacimientos porque
ellos creían que el destino de los ricos y poderosos podían afectar a toda la
sociedad.
Para
los songomayenses, igual que sucede en toda Cuba y en muchas partes del mundo,
los cumpleaños son esos días especiales en los que todos nuestros seres
queridos se acuerdan de nosotros y nos dedican palabras hermosas.
El
día en el que celebramos que nacimos, que la vida pasa, que crecemos y que
vamos madurando. Lo bonito es que, pese a todo ello, lo celebramos con alegría,
con cariño, fiestas y rodeados de seres queridos.
Cada
uno suele hacerlo a su manera, dependiendo de la personalidad, la edad y
circunstancias, pero por lo general es un día alegre.
Por
lo general, las fiestas de cumpleaños se celebran en la casa del
cumpleañero(a), o bien en otro lugar destinado para tal fin, donde se colocan
decoraciones que casi siempre incluyen globos, y también se les sirve comida y
refrigerios a los invitados.
Si
es un cumpleaños infantil, la actividad generalmente va acompañada de juegos y
entretenimientos, payasos, piñatas…
Mientras
que en las fiestas de cumpleaños de adultos se suele compartir consumiendo
bebidas alcohólicas, contando chistes y haciendo bromas y también se recuerdan,
en compañía de los amigos, momentos alegres o felices que se han vivido en
común y que los invitados conservan en su memoria.
En
países como España y Argentina es costumbre tirar de las orejas del
"afortunado", una vez por cada año que cumple. En otros países como
Estados Unidos, suelen darse tantos latigazos o pellizcos como años tenga.
En
República Dominicana, no está mal visto y hasta es buena suerte echarle agua al
cumpleañero, una tradición que también ponemos en práctica los cubanos.
En
Venezuela es muy común cantar "Ay que noche tan preciosa", para luego
pasar a cantar el cumpleaños; al terminar, todos los invitados abrazan al
agasajado luego que éste ha apagado las velas de la torta.
El
que cumple años suele recibir (y a veces dar) regalos por parte de los
invitados a la fiesta y también de parte de familiares cercanos y amigos.
Como
podemos percatarnos, muchas de estas costumbres, también las tenemos nosotros
los songomayenses, aunque quizás haya quienes prefieran hacer una salida o
comer en algún sitio agradable en compañía de sus seres más cercanos.
El
cumpleaños es un día significativo, que podemos pasar de la manera que más nos
guste.
Una
forma de celebrarlo puede ser reuniendo a todas las personas queridas y hacer
con ellas algo especial para compartir: una reunión en casa, una comida en
algún sitio agradable, la cuestión es pasarlo bien.
Cualquier
opción es buena, sea la que sea, siempre que nos haga sentir bien.
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